¿Mal aliento por las mañanas?

Para evitar el mal aliento por las mañanas conviene mantener una buena higiene dental

Es bastante habitual levantarse con mal aliento por las mañanas, pero ¿sabes por qué ocurre? ¿Y cómo se puede evitar la halitosis matutina? Te damos todas las claves a continuación. 

 

¿Mal aliento por las mañanas? Principales causas

Tener mal aliento al despertar puede deberse a varias razones. Identificarlas es fundamental si queremos prevenirlo o evitarlo. 

Sequedad bucal

La halitosis matutina se vincula principalmente a la escasez de saliva. Mientras estamos despiertos, la producción de saliva es significativa, pero durante el sueño, esta cantidad disminuye. 

Precisamente por esto, quienes sufren de sequedad en la boca, generalmente debido al consumo de ciertos medicamentos o al uso de respiradores bucales, tienden a ser más propensos a padecer mal aliento por las mañanas. 

Roncar o dormir con la boca abierta

¿Te has preguntado alguna vez si la posición en la que dormimos contribuye a la halitosis matutina? Resulta que sí. Roncar o respirar con la boca abierta durante el sueño favorece la sequedad bucal, creando un entorno propicio para el crecimiento de bacterias causantes del mal aliento.

 

Higiene bucal deficiente

La presencia de mal aliento a menudo se vincula con una mala higiene oral. En la mayoría de las situaciones, los problemas bucodentales, como la gingivitis o la periodontitis, son la causa principal de la halitosis.

 

Infecciones orales

El origen del mal aliento también puede asociarse a la presencia de infecciones, como:

  • Lesiones en la boca causadas por mordeduras o traumatismos.
  • Aparición de llagas debido al consumo de alimentos muy calientes.
  • Procedimientos quirúrgicos, como la extracción de un diente.

 

Soluciones al mal aliento por las mañanas

¿Cómo prevenir el mal aliento matutino? Estos consejos te ayudarán a reducir las probabilidades de sufrir halitosis al despertar:

  • Higiene bucal óptima. Cepilla tus dientes después de cada comida, utiliza hilo dental al menos una vez al día y no descuides la limpieza de tu lengua en cada lavado.
  • Hidratación. Bebe suficiente agua durante el día para que la producción de saliva durante la noche no se reduzca significativamente. Evita también bebidas alcohólicas, café o té, ya que pueden contribuir a la sequedad bucal.
  • Alimentación. Sigue una dieta abundante en verduras y frutas, baja en carne y grasas, especialmente durante la cena. Algunos alimentos (ajo, cebolla, pepinillos, mariscos…) pueden aumentar las probabilidades de despertar con mal aliento. 
  • Visitas al dentista regulares. Acudir a las revisiones con el odontólogo de forma periódica es clave para cuidar de tu salud bucal. Por supuesto, una limpieza profesional anual puede ayudarte a mantener a raya las bacterias causantes de la halitosis.

 

Vargas Ridao, expertos en el diagnóstico y tratamiento del mal aliento

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